Evaluar sin fatigar: cómo romper con el síndrome del formulario eterno
Si alguna vez participaste en una evaluación de talento que parecía no tener fin, no estás solo. En muchos procesos organizacionales, las evaluaciones terminan sintiéndose más como un castigo que como una oportunidad de aprendizaje o crecimiento.
El famoso «síndrome del formulario eterno» es real, y afecta tanto la calidad de los datos como la percepción del proceso. Según estudios del MIT Human Dynamics Lab, la duración excesiva de una evaluación disminuye drásticamente la concentración, la honestidad en las respuestas y, sobre todo, la disposición del evaluado a repetir el proceso.
Hoy, las organizaciones necesitan datos para tomar decisiones sobre talento, pero también deben cuidar la experiencia de quien los provee. Por eso, la pregunta ya no es si hay que evaluar, sino cómo hacerlo sin fatigar a las personas.
¿Qué significa una evaluación efectiva en 2025?
Una evaluación efectiva debe cumplir con tres principios clave:
La tendencia actual se aleja de los modelos extensos y se orienta hacia evaluaciones modulares, interactivas y contextualizadas. Según un estudio de Gartner, los enfoques que combinan elementos de storytelling, escenarios laborales contextualizados y tecnologías adaptativas generan tasas de finalización superiores al 85% en procesos de evaluación asincrónicos, en comparación con modelos tradicionales más extensos que rara vez superan el 60%.
¿Y cómo lo resolvemos en la práctica?
En Tezti, diseñamos evaluaciones que pueden medir una habilidad con 4 indicadores comportamentales claros en 5 minutos o menos, integrando dinámicas narrativas, preguntas inteligentes y una interfaz que genera fluidez. ¿El objetivo? Que la evaluación se viva como una experiencia útil y motivadora, no como una obligación administrativa.
Algunas claves que aplicamos:
Evaluar sin fatigar es una cuestión de respeto
Respetar el tiempo, la energía y la disposición de las personas es también una forma de cuidar la cultura organizacional. Evaluar de manera efectiva y cuidada no solo mejora los datos que obtenemos, sino que fortalece la confianza en los procesos de talento.
En palabras del Institute for Corporate Productivity (i4cp), “las empresas de alto rendimiento no solo miden más, sino que miden mejor: con foco, empatía y orientación al desarrollo.”
- No es necesario elegir entre profundidad y brevedad: con buen diseño, ambas son posibles.
- Evaluar bien es evaluar con intención, inteligencia y respeto por la experiencia del usuario.
- Y sobre todo: si queremos que el talento participe, tenemos que hacer que valga la pena.