Los especialistas de las áreas de Talento Humano nos encontramos más fortalecidos y preparados que nunca para atender los desafíos aún pendientes -y también los nuevos- que se incrementaron por esta nueva realidad.
El último estudio de la firma Gardner en el que participaron más de 800 líderes de Recursos Humanos en 60 países indica que la prioridad número uno para este 2021 será el desarrollar las habilidades y competencias críticas en las organizaciones.
Para atender este desafío, es necesario adoptar un enfoque dinámico y en que se involucren todas las partes interesadas para identificar en que habilidades trabajar y encontrar nuevas y mejores formas de desarrollarlas. Para hacerlo, el estudio sugiere tres imperativos básicos:
🔍 Facilitar una red interna de detección de necesidades de habilidades cambiantes: es tan acelerado el cambio en las áreas de negocio que muchas veces las soluciones de aprendizaje o desarrollo pueden llegar tarde por lo que es importante entrenar y empoderar a los responsables de cada área en la identificación oportuna de esas necesidades y sobre todo, que las áreas de Talento Humano adquieran un rol formativo y de facilitadores de proceso, en vez de un rol administrativo, controlador y centralizado.
🚀 Identificar e implementar aceleradores de habilidades para su desarrollo en el momento oportuno: es necesario reconocer y adaptar los recursos existentes o los nuevos que se requieran para un desarrollo rápido de las nuevas habilidades. Muchas veces estamos inmersos en métodos tradicionales de capacitación cuándo hoy existen una amplia gama de medios para desplegar el aprendizaje de manera formal o informal en la empresa.
🏃🏽 Preparar a los colaboradores para tomar decisiones sobre sus propias rutas de aprendizaje: la red para el aprendizaje en la organización es tan compleja ahora que es necesario y más eficiente impulsar el deseo del «qué» y «cómo» aprender a cada colaborador. El desafío hoy para las empresas es impulsar la cultura de auto aprendizaje en sus colaboradores y a la vez, generar los recursos y caminos de aprendizaje hacia la obtención de las competencias o habilidades necesarias para el negocio.
En mi experiencia, no podemos dejar de lado el medio para lograr esto. Esta coyuntura que vivimos nos ha traído también muchos avances y formas nuevas y más efectivas para lograr atender este desafío. Es por eso, que yo consideraría un cuarto imperativo y que es:
🖥️ Aprovechar la tecnología de aprendizaje para impulsar este desarrollo de habilidades: hoy tenemos a la mano una gran variedad de recursos metodológicos y tecnológicos para descubrir necesidades rápidamente o para desarrollar jornadas y recursos formativos cada vez más atractivos, así como, para monitorear el progreso de los colaboradores. Me atrevería a decir que está al alcance de todas las organizaciones, pequeñas o grandes. Existen desde recursos gratuitos y en línea hasta plataformas muy robustas para un nivel de desarrollo más avanzado.
Les invito a reflexionar sobre la necesidad del desarrollo de habilidades en cada organización y tomar acción considerando estos imperativos. Ya sabíamos hasta hace poco que el «tiempo de vida» de una competencia oscilaba entre los 4 y 5 años. Hoy ya se habla de un año así que es importante tener una estrategia con un enfoque claro que nos permita lograr los resultados deseados.
¡Gracias por leer esto!
Autor: Manuel Barrantes Mugarra – Gerente General @Reach HR Group
Leer original: http://bit.ly/Desarrollo-de-Habilidades