UX en evaluaciones psicolaborales: por qué la experiencia del evaluado importa (y mucho)
Autora: Paola Chavez Chavez
Durante años, las evaluaciones psicolaborales han estado centradas en la validez y confiabilidad de sus instrumentos. Sin embargo, un componente fundamental ha sido históricamente subestimado: la experiencia del evaluado. Hoy sabemos que la forma en la que una persona vive el proceso de evaluación puede impactar directamente en la calidad de sus respuestas, su nivel de concentración e incluso su compromiso con la organización que la evalúa.
En Tezti, entendimos desde el inicio que la evaluación no es solo una medición técnica, sino también una experiencia humana. Por eso, diseñamos nuestra solución con un fuerte enfoque en UX y gamificación, integrando principios de diseño conductual, psicología organizacional y neurociencia cognitiva.
¿Qué impacto tiene una mala experiencia de evaluación?
Según un estudio publicado en Psychological Assessment (APA, 2019), el cansancio, la desmotivación y la baja percepción de utilidad durante una evaluación pueden disminuir significativamente la validez de las respuestas, especialmente en pruebas autorreportadas. Esto se conoce como «fatiga del evaluado», y es particularmente crítico en contextos donde se evalúan habilidades blandas o se requieren procesos cognitivos complejos.
La International Test Commission (ITC) también advierte que el contexto y el formato en que se presenta una evaluación pueden inducir sesgos, alterar la forma en que las personas interpretan los ítems o simplemente reducir su disposición a responder con autenticidad.
En otras palabras: una mala experiencia puede sesgar buenos resultados.
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Aquí es donde entra en juego la gamificación bien diseñada, no como adorno, sino como estrategia para fomentar inmersión, concentración y compromiso emocional.
¿Cómo lo resolvemos en Tezti?
Desde el diseño de Tezti, consideramos la experiencia del usuario como un eje central. Algunas decisiones clave:
- Narrativas inmersivas y desafíos breves, que capturan la atención del evaluado sin agobiarlo.
- Interacciones intuitivas, que permiten a personas de diferentes niveles digitales moverse con fluidez.
- Duración optimizada: cada módulo está calibrado para mantener la atención sin inducir fatiga.
- Tests gamificados validados psicométricamente, lo que permite conjugar UX y rigor científico.
Esto nos ha permitido obtener respuestas más genuinas, reducir los niveles de deserción durante el proceso y, sobre todo, mejorar la calidad del insumo para la toma de decisiones en talento.
Evidencia que respalda este enfoque
- APA (2020): señala que las condiciones emocionales del evaluado afectan la confiabilidad de los resultados.
- ITC Guidelines on Computer-Based and Internet-Delivered Testing (2017): destaca la importancia de la experiencia del usuario para asegurar validez ecológica.
- Harvard Business Review (2022): subraya que el diseño de experiencias de evaluación centradas en el usuario mejora la percepción de justicia organizacional y fortalece la marca empleadora.
Evaluar sí, pero con inteligencia emocional y diseño
Una evaluación no solo debe ser técnica y rigurosa; debe ser empática, motivadora y respetuosa con quien está del otro lado. En un mundo donde las experiencias cuentan tanto como los datos, diseñar evaluaciones con UX en el centro ya no es opcional, es estratégico.
👉 En Tezti transformamos la forma en que las personas viven la evaluación, generando datos más confiables y experiencias más humanas.
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